Los cuidados de las suculentas son aparentemente muy sencillos, de ahí a que este tipo de plantas sean cada vez más populares en nuestras casas. Aportan vida y calidez al hogar, y son muy decorativas, además, se trata de una familia botánica tan amplia que existen decenas de variedades distintas en color, tamaño y forma. Pero que sean fáciles de cuidar no significa que no haya que tener bien claros algunos puntos.
Qué son las plantas suculentas
Las suculentas, también llamadas crasas, son un tipo de plantas cuya principal característica es que almacenan el agua en los tallos, las raíces y las hojas. Por eso, las hojas suelen presentar ese aspecto carnoso y grueso, aunque su grosor puede variar según el género de la planta. Prefieren los lugares cálidos y con un nivel de humedad bajo.
Consejos para el cuidado de las suculentas
Estas plantas no son demasiado exigentes, ya que son resistentes y se adaptan al medio; no obstante, es importante conocer sus necesidades para que crezcan sanas y bonitas. Estos son algunos consejos para darle los mejores cuidados a tus suculentas.
Suficiente luz
Las plantas suculentas necesitan mucha luz, al menos unas seis horas de sol durante el día. Pero ojo con las suculentas recién plantadas, porque aún son demasiado delicadas y pueden quemarse con la luz solar directa. En este caso es mejor que la exposición al sol sea gradual o a través de una cortina traslúcida.
Girar la maceta
A las suculentas les encanta tomar el sol, sin embargo, si los rayos inciden todo el tiempo del mismo lado, la planta comenzará a inclinarse. Por eso ir girando la maceta día a día ayudará a que crezcan derechas.
Agua según la estación
Las suculentas no necesitan demasiado riego, pero hay que tener en cuenta la estación. El periodo de desarrollo de las suculentas se produce en primavera y verano, y será cuando necesiten algo más de agua. Eso sí, hay que esperar siempre a que la tierra esté seca entre riego y riego.
Un buen drenaje
Un exceso de agua puede acabar con las suculentas, así que hay que procurarles un buen drenaje. Esto lo conseguiremos utilizando un buen sustrato, suelto y esponjoso, y un contenedor con un orificio para la expulsión del exceso de agua.
Cómo regar las suculentas
Para el cuidado de las suculentas es fundamental regar de manera adecuada. Esto debe hacerse mojando directamente la tierra, sin mojar las hojas de la planta. Otra opción es colocar la maceta con la suculenta en una bandeja con agua para que la propia planta absorba el agua por el orificio de drenaje. Si se hace de este modo hay que estar pendiente y retirar la bandeja una vez que la tierra se vea ligeramente húmeda.
Limpiar las suculentas
Aunque no se recomienda pulverizar las suculentas, sí es aconsejable limpiar de vez en cuando las hojas para retirar el polvo, que puede afectar a su crecimiento. Se puede emplear un pincel y un paño húmedo.
Con estos sencillos consejos para los cuidados de las plantas suculentas, conseguirás que crezcan preciosas, que se vean más coloridas y que florezcan con más fuerza.