Durante el invierno tendemos a dejar el jardín un poco de lado, lo cual es un error si queremos disfrutarlo en todo su esplendor cuando llegue la primavera. Aunque el frío no invita demasiado a salir, los cuidados del césped cuando llega el frío y las heladas son fundamentales para mantenerlo saludable todo el año.
Por qué debes proteger tu césped en invierno
Existe la idea de que el mejor periodo del año para cuidar del jardín y del césped es la primavera, cuando la vegetación está brotando de nuevo; o bien durante el otoño cuando está almacenando nutrientes y agua para pasar el invierno. La realidad es que cuidar el césped para el invierno es la mejor manera de asegurar que el manto se mantenga vivo, oxigenado, nutrido y verde durante el resto del año. Por eso es recomendable prepararse para el invierno y las bajas temperaturas, aunque pueda dar un poco de pereza.
Consejos sobre el cuidado del césped en invierno
Los cuidados del césped en invierno en realidad son muy sencillos, lo importante es no dejarlos pasar y mantener una constancia. Implementando unas medidas rutinarias durante esos meses, el césped llegará a la primavera brillante y frondoso.
Limpiar la superficie
El primer paso es rastrillar la superficie para limpiar el césped de restos orgánicos, como hojas o hierbas sueltas. Estos restos no sirven como abono natural, ya que la humedad del invierno, las heladas y las temperaturas bajas, pueden provocar que la hojarasca se llene de hongos, uno de los enemigos principales del césped. Es un buen momento también para retirar las malas hierbas que pueden haber proliferado en algunas zonas durante el otoño. Se puede utilizar un extractor manual de malas hierbas, o una simple gubia.
Cortar periódicamente
A la hora de cortar el césped es importante fijarse en la longitud. No se debe dejar muy alto para evitar los mencionados hongos, o que algunos animales lo utilicen como refugio, ni tampoco muy corto porque las raíces quedarían desprotegidas en las noches más gélidas y durante las heladas. La altura recomendada es de unos 4 o 5 centímetros. El césped debe cortarse cuando está seco, por ejemplo al mediodía, cuando se haya evaporado el rocío nocturno. En invierno, el césped crece más despacio así que habrá que cortar con menos frecuencia, pero es importante mantenerlo con la altura adecuada.
Aplicar fertilizante
En las zonas donde los veranos son calurosos y secos, el césped necesita recuperar los nutrientes perdidos cuando llega el otoño o cuando las temperaturas comienzan a caer, independiente de que la estación sea lluviosa.
Utilizar un buen fertilizante es muy recomendable para unos buenos cuidados del césped en invierno, porque ayuda a que se llene de nutrientes y pueda almacenar energía de cara a la época más fría. En este punto es importe elegir un fertilizante adecuado al tipo de césped y seguir las indicaciones del fabricante, en cuanto a la cantidad. Utilizar fertilizante en exceso puede terminar estropeando la vegetación.
Con estas sencillas pautas para cuidar el césped en invierno, y un poco de constancia, conseguiremos que se mantenga bonito durante todo el año.